Y pasados los pocos días que las Sierras de la Ventana se vistieron de blanco, la nieve se va yendo y permitiendo el retorno de los colores del invierno.
En un invierno restringido y atípico, la nevada registrada que no fue tan significativa como la de otros años, cautivó por las redes a miles de deseosos por vivirla, tocarla y jugar con ella.
Ya solo se aprecian algunas pinceladas blancas sobre las cumbres más importantes, pero el retorno de los colores del invierno, y signos claros en la naturaleza de estar preparada para el día después, con la llegada pronta de la primavera.
Mientras tanto, los innumerables arroyos que descienden de las sierras, se exhiben pristinos, por esa nevada que va quedando ya en el recuerdo de otro invierno blanco en las Sierras de la Ventana.
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